La hipoteca no es el único gasto que conlleva la compra de una vivienda. De hecho, existen unos cuantos gastos e impuestos más a los que hay que hacer frente para convertirse en el propietario de un inmueble.
Entre la tasación de la casa, el notario, la tasa de registro y los impuestos correspondientes, se recomienda tener un ahorro de entre 10% y 12% del precio de la casa. Todos ellos son gastos obligatorios que giran en torno a la compra de una vivienda, aunque la “factura” a pagar dependerá de si se trata de una vivienda nueva o utilizada y del precio de venta. Te resumimos en qué consiste cada uno y cuál es su importe aproximado en 2021.
Un gasto a tener en cuenta a la hora de comprar una casa, tanto nueva como de segunda mano, es la notaría. La remuneración de los notarios están regulada por el gobierno y todos cobran lo mismo por los mismos servicios. En el caso de disponer de la escritura pública de compraventa, los precios son entre 600 y 875 euros, dependiendo del precio del inmueble. Por ejemplo, por un piso de 100.000 euros pagarías aproximadamente 850 euros, mientras que por uno de 250.000 euros se pagaría unos 1.000 euros.
También hay que tener en cuenta la inversión para inscribirse en el registro de la propiedad firmado por el notario. De nuevo, las tarifas las marca la normativa y dependen directamente del precio del inmueble, aunque suelen oscilar entre los 400 y los 650 euros.
El comprador de una vivienda también debe reservar algo de dinero para pagar impuestos, aunque la cantidad dependerá del precio de la vivienda y de si es nueva o de segunda mano.
En cuanto a los gastos e impuestos en la compra de un nuevo hogar, el impuesto más importante es el IVA, que en 2021 asciende a 10%. Es decir, supondría 10.000 euros en el caso de una vivienda de 100.000 euros y 25.000 para una vivienda de 250.000 euros.
Además, al IVA hay que añadirle un segundo impuesto: el de Actos Jurídicos Documentados (IAJD). Este impuesto lo paga el comprador y en Andalucía es 1.5%.
Por otra parte, para casas usadas el impuesto más importante es el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales (ITP). En este caso, el importe depende del porcentaje que se aplique sobre el precio registrado y de la comunidad autónoma en la que se encuentre la vivienda. En Andalucía este porcentaje es 8%.
Un gasto a tener en cuenta a la hora de comprar una casa, tanto nueva como de segunda mano, es la notaría. La remuneración de los notarios están regulada por el gobierno y todos cobran lo mismo por los mismos servicios. En el caso de disponer de la escritura pública de compraventa, los precios son entre 600 y 875 euros, dependiendo del precio del inmueble. Por ejemplo, por un piso de 100.000 euros pagarías aproximadamente 850 euros, mientras que por uno de 250.000 euros se pagaría unos 1.000 euros.
Si el comprador va a adquirir la vivienda nueva o de segunda mano a través de un préstamo hipotecario, habría que sumar algunos gastos adicionales a la compra.
Si el comprador va a solicitar una hipoteca, se debe pagar a un tasador para que valore el inmueble y para que el banco sepa qué porcentaje de financiación puede conceder. Por lo general, las entidades están prestando una cantidad equivalente a 80% del precio de compra o del valor de tasación, aunque para una segunda vivienda suele ser de 70%. En 2020, la tasación supone un coste de entre 250 y 600 euros, dependiendo de la entidad que realice la tasación, el tipo de inmueble y su valoración.
La tasación tiene una vigencia de 6 meses a partir de la fecha de emisión
Desde la entrada de la nueva Ley Hipotecaria en junio de 2019, el resto de gastos los asume el banco: como la notaría, el registro y el AJD.
Esta comisión puede alcanzar hasta 2% del capital prestado, según lo acordado con la entidad financiera. Y esta cantidad se descuenta directamente del dinero que le das al hipotecado. Sin embargo, hay muchos bancos que no aplican esta tarifa.
Fuente: Idealista.com
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